Varitas de Palo Santo

Limpia y Purifica el Ambiente, brinda Equilibrio Emocional
Eleva el Autoestima, Mejora el Humor, disminuye el Estrés

También conocido como “Madera Sagrada” desde tiempos ancestrales, el Palo Santo ha sido utilizado en su estado natural o como incienso, para fines energéticos, para curar dolores físicos y enfermedades causadas por estrés, para mantener la calma y el equilibrio emocional, elevar la autoestima y mejorar el humor. Ya sea en infusión o incienso, el Palo Santo es ideal para limpiar y purificar el ambiente.

Las propiedades del Palo Santo aparecen cuando el árbol muere y se seca. Pasan algunos años para que la madera desarrolle los componentes que generan su característico olor. 

El Palo Santo tiene un olor dulce y leñoso, con toques de menta, eucalipto y limón. Las culturas prehispánicas solían utilizarlo para rituales religiosos y espirituales, para atraer la buena suerte, alejar la negatividad y para conseguir una mejor comunicación espiritual con sus dioses.

El incienso de esta madera contiene propiedades medicinales antirreumáticas, diuréticas, depurativas y antisépticas, además de ser una gran fuente de antioxidantes. Por ello, el Palo Santo es muy común en prácticas como el yoga, el reiki y la aromaterapia, ya que ayuda a limpiar y purificar el ambiente.

¿Cómo se usa el Palo Santo?

Es común usarlo como incienso, encendiendo un pedazo de madera seca para esparcir el humo en un espacio determinado. Sin embargo, para que la madera se mantenga encendida, hay que prender la llama cada cierto tiempo y dejarlo en un recipiente para que este se apague solo. También se lo puede preparar en "infusión", hirviéndolo por 15 minutos a fuego lento, para luego dejarlo reposar 5 minutos, filtrarlo y tomarlo solo o con algún endulzante natural, como el azúcar de caña o miel.

CONTENIDO.- La cajita contiene de 20 a 22 Varitas de Palo Santo, cada una de aproximadamente  10 cm de largo y 1 cm de grosor.

Tus Varitas de “Palo Santo” han sido Activadas y Magnetizadas en Ceremonias Ancestrales por Chamanes y Yachaks  de las montañas y selva Amazónica, por lo que constituyen poderosos elementos para alejar todo maleficio y atraer la bondad y bienestar.